Espero aprender adisfrutar de esta misma forma cada nota, cada acorde, cada paso de mi vida, cada día. Quiero aprender a improvisar. ¡Quiero hacer de mi vida una hermosa pieza de jazz!
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Reflexiones acerca de este nuevo barrio en el que vivo
El barrio de los 40 es legendario. Desde que recuerdo he escuchado expresiones de angustia de las personas que se acercan a él o que ya son residentes… Leer más
Hola lilyan, fìjate que hace poco estuve en una presentación de las hermanas jensen de canada y precisamente tocan jazz....Era la primera vez que oia jazz formal, asi de ponerle atención y eso me dio stress! jaja porque no sabía si estaban empezando o estaban calentando, luego no distinguia cuando terminaba algo o empezaba lo otro , jaja te entiendo perfecto, Como nos estresa la incertidumbre y el no saber que sigue, ahhh! que desesperados somos!!!
ResponderEliminarHa Jugar se ha dicho!!!
Qué divertido Aracely. Y, ¡pues sí! Sólo hay dos alternativas, jugar sufriéndolo o jugar gozándolo. Esto de ensayar -una y otra vez, porque los hábitos son fuertes- soltar el control es maravilloso. Es relajante. Y me ha dejado asomarme a la posibilidad de jugar gozándolo. Al menos ya lo dominé con el jazz. Ahora, sigo ensayando con la vida.
ResponderEliminarUn abrazo ¡con inesperados vericuetos jazzísticos!