jueves, 18 de abril de 2013

¿Y si me muero?



Luis, gracias por estar en el momento de más miedo.

Hoy me llevé un sustazo.

A primera hora de la mañana fui a hacerme una mastografía porque hace unos días sentí una bolita en mi seno derecho. La señorita del centro de imagenología me dijo, con su tono de rutina, que el día de mañana podía recoger mis resultados a partir de las 8.30 de la mañana. Así que continué mi día olvidándome del tema. A eso de las 7 de la noche recibí una llamada, "¿Señora Lilyán de la Vega? Le llamo del Centro de Imagenología, ya tenemos sus resultados, pero el doctor me pidió que le avisara que necesitamos hacerle un ultrasonido." Me dio un vuelco el corazón. "Está bien, ¿puede recibirme mañana por la mañana?", pregunté. "No. El doctor quiere que venga ahora mismo." Salté al carro y me dirigí, con el alma en un hilo, al lugar.

El camino se me hizo eterno. Me dio tiempo de pensar en qué iba a hacer si me decían que tenía cáncer. Lo primero que me vino a la mente, por inverosímil que parezca, fue: de inmediato voy y me quito estos brackets que ya alucino. No voy a pasar los últimos meses de mi vida sin poder disfrutar de la comida. Luego vino lo más fuerte, ¿querría quimioterapia, un tratamiento naturista? ¿Le diría a mi papá? No, se iba a preocupar y eso no le iba a hacer bien con su diabetes. Mejor lo solucionaba yo misma y le decía una vez que todo estuviera bajo control... o que no lo estuviera. ¿Le diría a mis hijos? Lo bueno es que la casa se pagaría sola, por el seguro. Lo bueno es que mi libro ya está por salir, tal vez me diera tiempo de presentarlo. No quería dejar de escribir, pero quería trabajar menos, para estar más con mis hijos. Tenía que ponerme a organizar tiliches, no pensaba dejarles a los niños una herencia de cosas que les daría culpa tirar aunque no supieran qué hacer con ellas...

¿Y qué onda con mi balance emocional? ¿qué decía mi maestro que tenía que hacer si una emoción me secuestraba? Empecé a verla venir, con todas sus intenciones: la tristeza amenazaba con humedecerme los ojos antes de tiempo. "Atiéndela cercanamente", recordé. Y eso hice... por unos instantes. Luego pensé, ¿y por qué estoy triste? Para, Lilyán, para... todavía no sabes nada. Aquí, ahora. Aquí, ahora.

Una hora más tarde, aún con un hoyo en la panza, me despedí del médico agradeciéndole su amplia explicación. Todo está en orden. Me había llamado porque el exceso de tejido fibroso le impedía darme un diagnóstico determinante de la mastografía. Pero el ultrasonido había descartado la presencia de ningún tumor. Cambios hormonales propios de mi edad, terapias hormonales tomadas a lo largo de mi vida y probablemente el momento de mi ciclo menstrual eran las responsables de tan turbio panorama en la placa inicial. Podía irme tranquila.

Estoy agotada y, afortunadamente, en paz. Sospecho que debo trabajar mucho, mucho más mis emociones y la tendencia de mi mente a viajar a futuros imaginarios. Y me quedo pensando... ¿qué me falta hacer antes de morirme? Tanto... lo principal, acompañar a Sabina y a Renato a crecer. Pero si eso ya no fuera posible, lo que más me hace falta es prepararme y prepararlos para poder irme de esta vida sin angustia, para poderles transmitir paz, para poder decir adiós sin mirar atrás. Mucho trabajo.

Realízate el auto examen hoy. No siempre se corre con la misma fortuna; y cuanto antes se detecte cualquier anomalía, más fácil será erradicar el problema sin amenazar tu vida.

2 comentarios:

  1. Querida prima. Celebro ese encuentro breve con la muerte. Pocas veces tenemos la oportunidad de ver mas de cerca algo que va a ocurrir tarde o temprano a todos y el hecho de hacernos concientes de ella y de poder seguir viviendo con esa conciencia renovada hace que la vida sea aun mas plena. Viví lo mismo en el terremoto de Chile y de ahi reconocí amores, pasiones, prioridades y sueños. Todos nos estamos muriendo, si vivimos desde esa conciencia la vida se hace increíblemenre valiosa. Un abrazo y celebro mas aún coincidir como primos en esta vida.

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  2. Felicidades por tu Blog.
    Gerardo Enríquez

    http://www.cronicasmaratonytriatlon.blogspot.mx/

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